Agriturismo en Emilia-Romagna: mi experiencia en La Valle del Re
Descubre como fué mi experiencia en el Agriturismo La Valle del Re en Emilia-Romagna: hospitalidad, paisajes, desayuno local y tips para tu viaje.
Última actualización:
16 September 2025
Palabras clave:
#experiencia
Lina Avila Henao
Creadora
Había visto a una instagramer alojada en una villa hermosa en la Toscana, y mencionó la palabra agriturismo. Desde ese momento me causó curiosidad y se lo mostré a mi esposo.
Ambos dijimos: “¡Pues este será el viaje para celebrar tus 40!”. Esto que te cuento fue hace ya dos años. Desde entonces empecé a leer e investigar qué era exactamente un agriturismo y cuáles eran los mejores.
¿Qué es un agriturismo?
Es un tipo de alojamiento rural típico de Italia, donde antiguas casas de campo o granjas abren sus puertas a viajeros. Allí puedes hospedarte en medio de la naturaleza y disfrutar de los productos que se cultivan o elaboran en la misma finca: quesos, vinos, panes, mermeladas, yogures, postres. Algunos son muy tradicionales, otros modernos, pero todos tienen en común esa conexión con la vida del campo y la gastronomía local.
La mayoría de resultados online me llevaban a la Toscana, pero mi esposo tenía otra idea: quería ir a Emilia-Romagna, porque había visto en un programa de televisión (Tucci in Italy) que esa era la verdadera cuna gastronómica de Italia.
Así que comencé a buscar en blogs y páginas, pero la verdad es que no encontraba muchos agriturismos en Emilia-Romagna. Y los que aparecían eran villas inmensas, donde alquilaban casas completas de 2 o 3 habitaciones, pensadas para grupos de 8 o 10 personas.
Lo que yo necesitaba era simplemente una habitación en una casa de campo tradicional, tipo villa italiana, donde pudiéramos descansar, relajarnos y probar lo mejor de los productos de la región. Y, claro, que no se viera “viejo”… porque a mi esposo le encantan los espacios modernos.
Después de una búsqueda exhaustiva, encontré el Agriturismo La Valle del Re y recuerdo que le pedí a los ángeles que fuera un lugar mágico…
Y así fue.
Superó todas nuestras expectativas: moderno, con vistas hermosas, a un precio asequible y, lo mejor, la hospitalidad de sus dueños.
Qué nos encantó del Agriturismo Valle del Re
Las vistas y la tranquilidad: la propiedad está rodeada de campo y colinas. Perfecta para desconectar, leer o simplemente mirar el atardecer.
Las habitaciones: eran amplias, cómodas y muy limpias. Con decoración sencilla pero cuidada al detalle. Todo se sentía nuevo y bien mantenido, lo cual fue un plus porque muchas veces en este tipo de alojamientos lo rústico puede confundirse con lo viejo. Aquí fue todo lo contrario: espacios frescos, acogedores y funcionales.
Las instalaciones: Los espacios estan diseñados para relajarse al aire libre. Piscina y jacuzzi con vista a las colinas, sillas para tomar el sol, zonas verdes amplias donde simplemente puedes pasear o sentarte a leer. Todo invita a desconectar y a disfrutar del ritmo pausado del campo italiano.
La hospitalidad: los dueños son encantadores. Desde que llegamos nos sentimos como en casa. Nos prestaron bicicletas para recorrer los alrededores y hasta nos ayudaron a reservar una visita a una fábrica de producción de Parmigiano Reggiano (un sueño hecho realidad para mí y para los amantes del queso).
La complicidad: me ayudaron a conseguir la torta para el cumpleaños de mi esposo. Yo había buscado dónde estaba la panadería más cercana y me fui sin decirle nada a nadie. Cuando llegué, estaba cerrada. Con mucho pesar empecé a devolverme, hasta que coincidencialmente me crucé con el dueño del agriturismo. Me dijo que esperara un momento: su esposa me recogería en el carro y me llevaría a un lugar donde sí pudiera comprarla. Y así fue. Aunque terminé en el Carrefour (y no en una pastelería italiana), conseguí la torta ¡Y lo importante es que la sorpresa salió perfecta!
También nos regalaron una botella de Prosecco para celebrar, un gesto inesperado que nos dejó boquiabiertos y con el corazón lleno de gratitud.”
El desayuno de lujo: cada mañana nos esperaba una mesa digna de fotografía: quesos frescos de la región, pan artesanal, pastries, yogur casero, prosciutto di Parma y frutas recién cosechadas.
El precio: muy asequible si lo comparas con villas de la Toscana.
Lo que más nos gustó es que no pagamos una fortuna y vivimos una experiencia auténtica, moderna y con hospitalidad de primera. Sentimos que la relación calidad-precio fue excelente.
Qué haríamos mejor para la próxima venida
Me gusta ser honesta, así que aquí les cuento que haríamos diferente.
Vendriamos por más tiempo: La verdad es que un fin de semana no fue suficiente y amamos la experiencia. Antes de venir no sabíamos qué esperar la verdad, pensamos que nos íbamos a aburrir, pero la pasamos increíble.
Alquilaríamos un carro: Lo recomiendo totalmente. La zona es amplia y hay varios lugares para explorar: pueblitos pequeños, fábricas de quesos, viñedos, trattorias escondidas. Sin carro dependes de caminatas largas o taxis, que no siempre son fáciles de conseguir.
Aun así, recuerdo con cariño la tarde en que nos aventuramos a caminar hasta el pueblo y terminamos comiendo una pizza deliciosa en un pequeño local familiar. Ese tipo de momentos espontáneos son los que hacen que un viaje se quede grabado en la memoria.
Consejos para aprovechar tu experiencia
Alquila un carro: es la mejor forma de moverte por Emilia-Romagna y descubrir todo lo que ofrece la región.
Pregunta por experiencias locales: en nuestro caso, los dueños nos ayudaron a reservar la visita a la fábrica de Parmigiano Reggiano, pero también puedes preguntar por bodegas de vino o productores de vinagre balsámico.
Disfruta del desayuno: de verdad, vale la pena levantarse temprano y sentarse sin prisa a probar cada cosa.
Lleva snacks o planea cenas con antelación: En este agriturismo el restaurante no está habilitado aún para almuerzos o cenas, solo está para desayunos. Entonces al no tener restaurante, te conviene comprar algo de mercado para los días que vayas a estar. Puedes guardarlo en la nevera porque cada habitación tiene una cocina muy bien equipada.
Mejor época para ir: Primavera y Otoño son ideales. Buen clima, menos turistas y paisajes espectaculares.
Por qué elegir Emilia-Romagna en lugar de la Toscana
Aunque la Toscana es bellísima y más conocida, Emilia-Romagna tiene un encanto especial:
Es menos turística, lo que significa precios más bajos y menos multitudes.
Es considerada el corazón gastronómico de Italia (Parma, Módena y Bolonia están aquí).
Los agriturismos, aunque menos famosos, son auténticos y familiares.
Para terminar
Para mi esposo, este fue un cumpleaños inolvidable. Y para mí, la confirmación de que confiar en la intuición, viajar con el corazón abierto y un poco de curiosidad te puede llevar a lugares mágicos, incluso más allá de lo que habías imaginado.
Lina Avila Henao
Creadora