Donde comer en Porto
Si hay algo que me gusta descubrir cuando viajo es la comida. En Porto, cada bocado cuenta una historia, y la cocina portuguesa tiene algo muy propio: incluye ingredientes frescos, mezclados con tradición. En este artículo te comparto mi selección personal de restaurantes y cafés en Porto a los que volvería sin pensarlo.
Última actualización:
2 May 2025
Palabras clave:
#comida

Lina Avila Henao
Creadora
Debo ser honesta: Portugal tiene una de las gastronomías más deliciosas que he probado. Sin duda, está en mi top 5 de cocinas del mundo. Porto, en particular, es un paraíso para los amantes de la buena mesa, y hay varias razones para eso. Una de ellas es la variedad de ingredientes del mar que se utilizan: pescado blanco, salmón, sardinas, bacalao, pulpo… todo preparado con una frescura inigualable. Las papas son increíblemente sabrosas, y la famosa francesinha es toda una novedad que vale la pena probar. También me encantan las sopas de vegetales frescos, los risottos y, por supuesto, los irresistibles pasteles de nata.
Un detalle que valoro muchísimo es que casi todo se cocina con aceite de oliva de excelente calidad, algo que se nota en el sabor de cada plato, se siente bien balanceado, sin excesos ni matices artificiales.
Y ni hablar de los aperitivos. Las aceitunas con pan blando en el centro pero crocante por fuera o las diferentes croquetas rellenas de queso, carne o pescado son un buen abrebocas de lo que será una cena inolvidable.
Aquí te comparto mi selección personal de lugares donde comer en Porto, esos sitios a los que sin dudarlo volvería.
Zá en Porto
Es un restaurante pequeño, con alma familiar, atendido por el dueño y su esposa. Tiene pocas mesas y un ambiente tranquilo, de esos lugares donde todo parece cuidado sin ser pretencioso. El menú sorprende: es corto, pero está bien pensado y lleno de sabores locales.
Las entradas van desde sopas y almejas hasta croquetas de bacalao, risoles de carne, alheira (una salchicha típica portuguesa) y champiñones rellenos. De plato fuerte, destacan el pulpo a la parrilla con papas, el arroz de pulpo (que viene acompañado de un filete de pulpo empanado, suave y lleno de sabor) y varios pescados como la dourada o el bacalao, preparados tambien a la parrilla. Si lo tuyo no es la comida de mar, también hay opciones de carne y pollo, cocinadas al estilo portugués.


Nosotros empezamos con una sopa de pollo y croquetas de bacalao, y seguimos con el arroz de pulpo y la dourada. Todo estaba en su punto, sin excesos, con ese sabor honesto que tiene la comida hecha en casa.
Braseiro
Este es el lugar para probar la famosa francesinha. El restaurante tiene mucha personalidad: paredes de piedra, armarios de madera y objetos antiguos. También, mesas grandes, lámparas llamativas y una atmósfera que mezcla lo tradicional con lo acogedor. La gente ya llega sabiendo lo que quiere —“una francesinha, por favor”— es probablemente la frase más escuchada en la sala.
La francesinha es un clásico de la cocina portuguesa, creada por Daniel David Silva en los años 50, después de regresar de Francia con la idea de adaptar el croque-monsieur al gusto local. ¿El resultado? Un sándwich relleno con filete de carne, jamón y queso, todo bañado en una salsa espesa, ligeramente picante, hecha con tomate y cerveza. Puedes pedirla con huevo, sin huevo, más sencilla o “con todos los juguetes”.

Yo no soy muy fan de la carne, así que me fui por otras opciones del menú: los petiscos!. Pedí una ensalada de pulpo (fresquisima) con salsa verde y huevos de pescado, un risole de carne, champiñones y trufa (absolutamente espectacular), y una ensalada de queso de cabra con nueces. Un restaurante para no perderse.


Popina Wine Bar
Un wine bar chic y acogedor. El dueño es un apasionado del vino y te permitirá probar varias opciones antes de decidirte. Ideal para una cena ligera con platos pequeños para compartir. Abre después de las 6 pm y, por su popularidad, te recomiendo reservar porque tiene pocas mesas.
Entre los platos que pedimos estaban: guiso de ternera en cocción lenta, langostinos a la parrilla, ensalada de pulpo y champiñones al ajillo. Todo muy bien servido y delicioso.



GH Restaurante
Ubicado dentro de un hostel elegante, con cocina abierta y ambiente moderno. Aquí nos deleitamos con un risotto de oxtail y pescado blanco con puré de coliflor. Las porciones son justas, pero cada bocado vale la pena. No te vayas sin probar el postre:
Bolo de chocolate casero con salsa de toffee y helado de sésamo. Simplemente espectacular!



Fábrica de Nata
El sitio más tradicional (en mi opinión) para disfrutar un buen pastel de nata en Porto. Hay sucursales en cada esquina. Los pasteles tienen un perfecto equilibrio entre la nata (que no es demasiado dulce) y la masa hojaldrada. Prueba los combos con una copa de Vino Porto o con una cerveza.

Bulha Sá Da Bandeira
Cocina tradicional portuguesa. El restaurante tiene un aire hipster, las paredes tienen grafitis a mano con mensajes de la gente. Aquí la especialidad de la casa es el pulpo. También probamos un excelente bacalao con papas y una entrada de queso, nueces y pan. Muy recomendado para los amantes de la buena comida.


Café Buuh
Un café sencillo y típico, la dueña explica en portugues en qué consisten cada una de las tortas. Es una parada perfecta de camino al trabajo o al coworking. Lo que más me gustó es la variedad de tés. El café es estándar, al estilo portugués, pero el lugar es bastante acogedor.


Bacalhoeiro
Este restaurante está en Vila Nova de Gaia, la zona famosa por sus bodegas de vino. Aquí probé el mejor bacalao que me comí en todo Portugal. Bacalhau em vinho do Porto, que yo lo traduciría como Bacalao preparado en una reducción de vino Oporto. ¿La razón? El bacalao de por sí es un poco salado, pero al estar marinado/cocinado en el Ruby Porto hace que se absorba todo ese dulce del vino y el resultado sea un sabor espectacular.
Manteigaria
Una opción más moderna para disfrutar pasteles de nata. Tiene varias sucursales en Porto y los pasteles siempre están frescos y calientes. Los locales son muy bonitos y tienen un aire moderno.

Mercado do Bolhão
Más que un lugar para comer, es toda una experiencia gastronómica. Perfecto para un recorrido de "tasting", probando croquetas de bacalao, quesos, tapas, pasta artesanal, sardinas y más. También puedes comprar productos frescos si tienes la opción de cocinar.


Tips para Disfrutar la Gastronomía en Portugal
Reserva siempre que puedas: Muchos restaurantes son pequeños y se llenan rápido si no puedes reservar, trata de llegar temprano, asi evitarás quedarte esperando afuera por bastante tiempo.
Revisa los horarios en Google, ya que algunos lugares cierran uno o dos días a la semana (usualmente lunes o martes).
Pregunta siempre por las especialidades del día, muchas veces son los platos más frescos y auténticos.
Para cerrar
Comer en Porto va a ser igual de importante para ti que recorrer sus calles. No es solo la comida (que es deliciosa), también es el ambiente, el orgullo de los portugueses al servirte un plato, los detalles. Hay algo muy real en cómo cocinan aquí: con tradición, con amor y con una calidez que se siente. Si te gusta viajar con el paladar, este es un lugar al que vas a querer volver.

Lina Avila Henao
Creadora